Las negociaciones comerciales y la intervención militar de EE.UU. en Irán han centrado la atención de los inversores en este mes de junio. La renta variable avanza liderada por las bolsas americana, china y japonesa; aunque la fortaleza del euro resta brillo al resultado final. En renta fija, nuestras carteras siguen acumulando rentabilidad, completando un buen primer semestre.
El comportamiento sectorial en el segundo trimestre es prácticamente un espejo de lo que sucedió en el primero: los peores sectores entonces son los que lideran la tabla desde marzo. El descanso en el liderazgo de tecnología y servicios de comunicaciones ha durado tan solo unos meses. No obstante, en el acumulado de 2025, industriales, financieras y utilities siguen mostrando el mejor desempeño.
Traspasado el ecuador del año, seguimos sin tener claro el escenario macro en el que nos vamos a mover en lo que queda de 2025.
De momento, el flujo de noticias en el frente de aranceles e inflación ha sido positivo desde entonces, y esto, unido a los datos de PIB del primer trimestre, ha hecho que las previsiones macro de consenso en Europa y China se sitúen incluso por encima de como estaban en marzo.
Las previsiones para EE.UU. sí que han caído, pero se quedan muy lejos de la temida recesión que se llegó a plantear en la primera mitad de abril. Además, el equipo de Trump ha empezado a mezclar palos con zanahorias, y se han producido novedades positivas tanto en desregulación como en política fiscal que mejoran las perspectivas de cara a los próximos trimestres.
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